Nietos de Marco Polo, hijos de Colón: viaje por la China de la ruta de la seda

En estos confines de las ‘Indias Occidentales’ somos todos simbólicamente hijos (bueno, hijastros, naturales… huachos como dice Sonia Montecino, lo que sea) de Cristobal Colón. Eso es sabido.

Marco Polo recorriendo la ruta de la seda - ilustración del Atlas Catalán, cerca de 1375 DC
Marco Polo recorriendo la ruta de la seda - ilustración del Atlas Catalán, cerca de 1375 DC

Lo que es menos sabido es que también somos nietos de Marco Polo. Colón antes de zarpar a descubrirnos, o a ponernos al descubierto, había leído y comentado de su puño y letra el famoso Libro de las Maravillas del comerciante veneciano, donde narra sus viajes por oriente, sobre todo por China, donde se quedó por casi dos décadas.
Facsimil del Libro de las Maravillas de Marco Polo, comentado por Cristóbal Colón
Facsimil del Libro de las Maravillas de Marco Polo, comentado por Cristóbal Colón

He estado hartas veces en China, y siempre bien entreverado con sus lugares y su gente, metiéndome por donde nadie va, sintiendo sus rincones, comiendo sus comidas, conversándole a su gente y regateando en sus bazares (como en este mismo blog ya he mostrado… hurgueteen para atrás). Pero nunca he estado allí como ahora quiero ir… es decir mirándola desde la perspectiva de un ‘hijo de Colón’ y ‘nieto de Marco Polo’. Ahora, aquella filiación mental de ambos míticos viajeros entre sí, y la de ambos con este lejano ‘descendiente’ mental suyo, me ha despertado el hambre por partir a redescubrir, con esos otros ancestrales ojos suyos, aquella ruta recorrida hace ya más de 700 años por el trotamundos veneciano.

Entre el 23 de Mayo y el 17 de Junio de 2011 recorreré la parte china de la Ruta de la Seda, entre Kashi, en la frontera con Kirguistán, y Lanzhou en el alto Huanghe (río Amarillo), la ciudad donde convergen todos los caminos que llegan a China del oeste.

Trazaré un largo bucle de 6.000 km que partirá y terminará en Lanzhou, primero en senda noroeste bordeando por el sur el desierto de Gobi, luego por el norte el desierto de Taklamakan («Lugar sin retorno») hasta Kashi, para después devolverme rodeando al Taklamakan por el sur, a la sombra de las míticas montañas Kunlun que bordean al Tibet. E iré visitando aquellas localidades por donde pasara Marco Polo, contrastando y complementando en cuánto pueda sus miradas con las mías.

Esa es mi principal agenda. Llevaré también agendas secundarias, tales como: visitar las magníficas cavernas con arte budista repartidas por esas inmensidades; conocer y sentir la presencia del famoso simbolismo chino de la Reina Madre del Oeste (deidad taoísta que preside desde esos parajes); levantar un itinerario para un próximo viaje cultural y de estudios grupal a China; y meterme a hurguetear en todos los bazares y mercados populares que encuentre, en busca de textos clásicos chinos de cosmología en ediciones viejas y antiguas, coleccionismo que es una de mis pasiones.

Aquí en este Blog iré haciendo la crónica de mi viaje, con El libro de la maravillas de Marco Polo en la mano, con videos, fotos y reflexiones sobre la experiencia vivida. Mis visitantes podrán hacerme comentarios y preguntas a medida que el viaje progrese.

Mapa de los viajes de Marco Polo - Enciclopedia Británica

4 comentarios sobre “Nietos de Marco Polo, hijos de Colón: viaje por la China de la ruta de la seda”

  1. Qué viaje Enzo! y con esa parentela tan ilustre…! intentar mirar con los ojos asombrados de Marco Polo, y a tu regreso, mirar nuevamente nuestra América con el «antecedente chino» con el que miró Colón. ¿Qué encontró aquí el genovés, que ya había encontrado el veneciano?

  2. Hola, Enzo, necesito hacerte unas preguntas para la revista Paula acerca de tu viaje a China. Te dejo mi mail, espero puedas responderme pronto.
    Saludos

  3. Que tal Enzo, estoy espectante por el próximo inicio de tú viaje el 23 de este mes. Estaré atento por las notas que irás haciendo.
    un abrazo

    Raúl

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